La mayoría de los vestigios prerromanos permanecen abandonados y sin investigar

Los historiadores apuntan a la Dirección Xeral de Patrimonio, capitalizadora de los estudios, como responsable de la actual situaciónTodo el mundo recuerda haberse emocionado alguna vez viendo en la televisión como se volvían a juntar dos familiares separados por la emigración durante décadas. Los vecinos de la Costa da Morte no pueden reencontrarse con su pasado porque la mayoría de sus monumentos prerromanos permanecen en el más absoluto abandono y sin estudiar. Los historiadores apuntan a la Dirección Xeral de Patrimonio, que quiere capitalizar todas las investigaciones, como principal causante de esta situación. Intentos de analizar el patrimonio como el realizado en 1998 en Castromiñán fueron gritos que se ahogaron en este desierto.
G.R.C.
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CARBALLO

El historiador Fernando Alonso Romero formaba parte del equipo de Fernando Acuña Castroviejo que en el año 1998 se propuso excavar el recinto castreño de la parroquia fisterrana de San Vicenzo de Duio, Castromiñán. «El proyecto lo frenó Patrimonio, que quiere ser el único que investigue, dejando de lado a la Universidad. Hasta nuestros alumnos tienen que realizar las prácticas en Portugal», denuncia Fernando Alonso. Esta oponión la comparte el profesor de Prehistoria, Antón Rodríguez Casal que asegura que faltan inversiones para la arqueología. Este experto sostiene que con tal sólo tres millones de pesetas se podría realizar un estudio profundo de alguno de los castros de la comarca.
Para ambos, la única solución posible para variar este orden es un cambio en la política de la Xunta. «No sólo hay un abandono del patrimonio prehistórico, sino del mediaval. Las iglesias y casas rectorales de la comarca están totalmente abandonadas. Se necesitan políticas más inteligentes y sensatas», asegura Fernando Alonso.
Iniciativas
En medio de estas deficiencias se han alzado una serie de voces. Las últimas han sido la del Concello de Vimianzo y la del Instituto de Estudios Bergantiñáns. El primero ha comenzado esta semana una campaña llamada Museo no tempo en el que, entre otras iniciativas, se señalizarán los monumentos megalíticos del municipio, los segundos organizaron este fin de semana una ruta por el patrimonio prerromano de Bergantiños.
Con anterioridad, Manuel Murguía ya había loado el dolmen de Dombate, en Cabana, en el año 1901, Pérez Bustamante e Isidro Parga Pondal lo hicieron en el 1925 y López Cuevillas en 1959. En los últimos años, a la iniciativa capitaneada por Fernando Acuña se sumó la asociación Neria, que organizó jornadas sobre estos monumentos y editó un libro, escrito por Xosé María Lema y Manuel Suárez sobre la arquitectura megalítica en la zona.
Tomado de: http://www.lavozdegalicia.es/hemeroteca/2001/06/12/610318.shtml